Fácil
7 min
106 kcal = 444kj /por porción
Carbohidratos | 20 g |
Energía | 106 kcal |
Grasas | 2.6 g |
Fibra | 2 g |
Proteína | 2.1 g |
Grasas saturadas | 1.6 g |
Sodio | 30.2 mg |
Azúcares | 18 g |
¿Cómo hacer para que el café frío tenga una consistencia espumosa?
Estas son algunas opciones para preparar un café frío espumoso:
Los productos lácteos, especialmente crema, nata y helado, dan mayor consistencia. Los puedes mezclar con el café o coronar la bebida haciendo una capa de espuma.
Prepara un café espumoso mezclando café soluble y agua caliente en partes iguales. Usa un batidor o máquina. Después de unos minutos tendrás una crema consistente a la que puedes agregar más agua, leche fría y otros ingredientes.
Mezcla los ingredientes en licuadora para darle una textura cremosa y suave al café frío. Si incluyes hielo la bebida tendrá mayor consistencia.
¿Es posible conservar el café frío en el refrigerador o congelador por largo tiempo?
Sí es posible. En el refrigerador puede durar entre tres y cuatro días y en el congelador hasta dos meses. Sin embargo, la recomendación es consumirlo en el menor tiempo posible ya que su calidad, olor y sabor característicos se perderán con el transcurso del tiempo.
Especialmente si el café contiene un producto lácteo, la bebida se estropeará más rápido, por lo que no debería pasar más de 24 horas en la nevera.
Si lo que buscas es preparar cubos con café para tener la bebida en instantes, prepáralos con el doble del producto y úsalos en corto tiempo. Sin embargo, con café instantáneo tienes una solución rápida que se disuelve en agua a cualquier temperatura.
¿Cómo endulzar y variar el sabor de un café frío sin usar azúcar o edulcorantes?
Hay diferentes ingredientes que puedes utilizar no solo para endulzar sino darle un toque diferente al sabor del café frío:
Caramelo: puedes agregar sirope o hacer el ingrediente en casa con azúcar morena, agua y mantequilla. Le dará un sabor dulce e intenso al café frío.
Frutas: puedes agregar zumo, rodajas o cubos de mango, cereza, naranja, piña, higo o uva, que son las opciones más dulces.
Esencias: añade vainilla o canela para dar intensidad al sabor del café y un toque dulce.
Miel: otra buena opción que además es natural.