Recetas caseras

10 consejos para hacer unas galletas fáciles y deliciosas en casa.

Te damos 10 consejos para que hagas unas deliciosas galletas en casa y no falles en tu primer intento.

Galletas con chips de chocolates

Sin duda el olor de unas galletas recién horneadas a todos nos trae muchos recuerdos de infancia horneando con la abuela unas deliciosas, doraditas y crocantes galletas. 

Hacer galletas puede ser una gran experiencia familiar, donde los que más la disfrutan son los niños, son recetas fáciles de hacer donde todos participaran haciendo alguna tarea, desde disfrutar combinar los ingredientes, amasar, decorar y por último disfrutarlas.  

El secreto de una buena galleta radica en la mantequilla, la harina y el azúcar, tres ingredientes que en diferentes proporciones abren la puerta a miles de posibilidades donde la creatividad y la originalidad a la hora de hacer son las que le dan ese sello personal con los que puedes jugar con formas y sabores. 

10 CONSEJOS PARA HACER GALLETAS FÁCILES EN CASA

Para preparar galletas existen miles de recetas, la mayoría bastante fáciles de hacer, sin embargo, a pesar de seguir la receta al pie de la letra, en muchas ocasiones el resultado no es el que esperábamos. A continuación, te contamos diez consejos que te ayudarán a preparar unas deliciosas galletas hasta volverte un experto. 

1. LEER LA RECETA

 

Mujer preparando galletas fáciles mirando receta

 

 

Quizás leíste esto y te pareció bastante obvio, pero antes de empezar a cocinar cualquier preparación hay que saber leer e interpretar la receta y no darle una hojeada rápida. 

Lo primero que hay que hacer es leer por completo la receta, tanto los ingredientes como los pasos. Es ahí cuando comprobamos que tenemos todos los ingredientes necesarios y después, podemos organizar los pasos y tiempos. Es importante saber qué nos espera antes de comenzar, de este modo podemos planificar todo el proceso y no a mitad del proceso darnos cuenta que dice “refrigerar la masa durante la noche” o “dejar varias horas los ingredientes a temperatura ambiente” tal vez te lleves sorpresas porque quizás esperabas tener unas galletas ahora, no mañana. 

Acostúmbrate a esta práctica de leer la receta completa y de tenerla a la mano y siempre visible mientras cocinas, no importa si ya tienes la suficiente experiencia al cocinar, este consejo hará que en todas tus preparaciones tengas todo bajo control y nada se te escape. 

2. ANTES DE EMPEZAR PRECALIENTA SIEMPRE EL HORNO 

 

Mujer ajustado temperatura en horno para hacer galletas fáciles

 

 

Como ya leíste por completo la receta, ya sabes a que temperatura debes hornear tus galletas. Mientras vas haciendo la mezcla puedes darle el tiempo suficiente para que el horno alcance la temperatura y comiences a hornearla. 

Es importante precalentar el horno porque si pones las galletas en el horno y la temperatura es demasiado baja, la masa puede esparcirse en lugar de endurecerse. Esto afecta el grosor de la galleta, su textura y cuán uniforme se dora. 

El hecho de que prendas el horno, marques en pantalla 170°C y luego presiones inicio, no significa necesariamente que en realidad haya 170°C en ese momento, tienes que darle el tiempo suficiente para que el horno alcance la temperatura y comiences a hornear. Ten en cuenta que esto depende del tipo de horno, así que anticípate y familiarízate lo más posible con tu horno y aprende dónde están sus puntos calientes y el tiempo que tarda en alcanzar la temperatura deseada. 

3. EL SECRETO ESTÁ EN LA MANTEQUILLA 

 

Para tener unas galletas perfectas es ideal sacar la mantequilla de la nevera y dejarla a temperatura ambiente, para que se ablande y solo hasta entonces, batirla suavemente con los demás ingredientes hasta que tenga una consistencia ligera y esponjosa. 

Utilizar la mantequilla a temperatura ambiente, es la mejor forma para mezclar homogéneamente los ingredientes secos como el azúcar y la harina y nos ayudará a mantener la forma de las galletas cuando las horneemos.  

La grasa que incorporemos a la mezcla afecta sus características, por ejemplo la mantequilla le aporta a las galletas la textura, las dora y les da sabor y color. La sustitución de una grasa diferente en lugar de mantequilla afecta el sabor de las galletas y también la textura, ya que otras grasas (manteca de cerdo, aceite vegetal, margarina etc) tienen un punto de fusión diferente al de la mantequilla. 

Seguir correctamente este paso es fundamental pues si no lo haces a tiempo y optas unos minutos antes en derretir la mantequilla, esto será el causante de que muchas galletas queden planas.  

4. ELIGE LOS INGREDIENTES CORRECTOS 

 

Cuchara de madera con azúcar morena para galletas fáciles

 

Al igual que la mantequilla, los ingredientes que incorporemos a la mezcla serán claves para que las galletas queden crujientes. La harina que elijamos influye mucho en el resultado final. Las harinas que son sin gluten o contienen poca cantidad, así como las que son bajas en proteínas, absorben menos agua. En consecuencia, la masa y finalmente la galleta está más blanda. Lo contario, a las harinas normales o la harina integral que hacen que las galletas queden más crujientes. 

5. UNA BUENA MASA

 

Rodillo y masa para galletas fáciles

 

Después de incorporar todos los ingredientes y amasarlos, debes con un rodillo aplanar la masa hasta que tengas el grosor deseado y poder cortarlas. Aquí es importante tener en cuenta el grosor de la masa porque de esto dependerá más adelante el tiempo que tu galleta necesita en el horno para no quedar cruda si es muy grueso, o quede muy dura si queda demasiado delgada. 

6. TODAS DEL MISMO TAMAÑO 

 

Pequeñas bolas de masa de galletas con chips de chocolate

 

 

Procura que todas tus galletas queden uniformes con la misma forma y tamaño, para eso puedes porcionar la masa pesándola, cortándola con platos, vasos o la cuchara para servir helado, aquí la recursividad será tu mejor aliado.  

Dividir la masa en porciones iguales te ayudará a garantizar que todas tus galletas queden del mismo tamaño y que se horneen al tiempo. Procura no hacerlas ni muy grandes ni muy pequeñas, si las haces demasiado granes es posible que el interior quede un poco crudo y los bordes se doren o si son demasiado pequeñas es posible que no se doren lo suficiente y el interior ya esté listo dejando como resultado unas galletas duras como una piedra. 

7. DALES SU ESPACIO

 

Bandeja con masas de galletas con chips de chocolate

 

 

Muchas variedades y tipos de galletas crecen y se esparcirán un poco durante el horneado. Esto es un indicador que tu galleta resultará como esperabas, así que asegúrate al momento de ponerlas en la bandeja, de proporcionar suficiente espacio entre ellas para que no se expandan más allá de sus límites y terminen pegándose unas con otras.  

Si de tu mezcla salieron bastantes galletas es mejor esperar un poco y hornear las galletas por turnos usando varias bandejas para darle a la masa el espacio que necesita. 

8. CONOCE TU HORNO 

Todos los hornos cocinan de manera ligeramente diferente, dependerá si estás cocinando con un horno convencional, con ventilador o de gas. 

Es importante que conozcas tu horno y tengas en cuenta el tiempo de cocción y la temperatura del horno indicada en la receta. 

9. NO LAS DESCUIDES EN EL HORNO

No te confíes con el temporizador de tu horno, si es tu primera vez haciendo galletas es mejor estar revisando a través del vidrio del horno como van tus galletas, el tiempo de cocción que te indican las recetas son una referencia genérica, pero este tiempo puede variar dependiendo el tipo de horno que tengas. 

Todas las variedades clásicas de galletas como la de chips de chocolate, la de mantequilla de maní y los macarrones de coco, estarán listas cuando comiencen a hincharse o endurecerse y los bordes estén dorados. Otras recetas requieren menos tiempo para hornearse y debes estar atento a otras señales que te indique que ya están listas. 

10. DÉJALAS ENFRIAR 

 

Bandeja con galletas fáciles horneadas

 

Escuchas el timbre de tu horno que indica que tus galletas ya están listas, estás impaciente y las quieres probar al instante, pero la mala noticia es que debes esperar un poco más. 

Cuando ya estén listas saca la bandeja del horno, deja las galletas allí durante unos dos o tres minutos antes de tocarlas o retirarlas de la bandeja, pasados estos minutos retíralas con cuidado con una espátula y déjalas en una rejilla para terminar de enfriar. 

Si las retiras de la bandeja estando todavía muy calientes, te puedes arriesgar a que dependiendo de la variedad de galleta estas se rompan o se desmoronen y será una lástima después de todo el trabajo que hiciste. 

Cuando ya estén frías ya podrás decorarlas como quieras añadiéndole el glaseado, azúcar de colores o grajeas, si lo haces cuando estén calientes es posible que todo lo que pongas encima de ella se derrita y no queden como esperabas. 

Recetas recomendadas

 IDEAS DE GALLETAS FÁCILES PARA PREPARAR EN CASA 

 

Galletas fáciles con taza de té y leche

 

Aquí te proponemos unas cuantas recetas de galletas fáciles para que explores estos consejos en tus preparaciones. 

 

DATOS CURIOSOS DE LA GALLETA

 

  • La palabra galleta proviene del francés “galette”, término que en ese idioma designa a una preparación similar a los crepes. 

  • En inglés “cookie” se deriva de la palabra holandesa koekje que quiere decir “pastel pequeño. 

  • Se dice que las galletas surgieron de las pruebas que hacían los cocineros antiguos con una masa básica hecha para verificar la temperatura de los hornos. 

  • El récord de la galleta más grande del mundo fue en 2003 en Carolina del Norte. La galleta midió 30 metros de diámetro y pesó cerca de 18 toneladas. Los cocineros se demoraron 12 horas en hacerla. 

  • La Reina Isabel I fue quien introdujo al “hombre de jengibre” al mundo moderno cuando les daba a sus visitantes favoritos este tipo de galletas con su figura personalizada. 

  • El monstruo come galleta fue invitado al programa de televisión de la reconocida chef Martha Stewart a cocinar sus galletas favoritas.