Muchas veces se descarta la limpieza de las frutas y verduras porque son alimentos frescos y saludables, sin embargo, es importante tener en cuenta la limpieza antes de su consumo. Conoce cinco recomendaciones de cómo hacerlo adecuadamente.
¿Por qué se deben lavar las frutas y las verduras?
Las frutas y verduras pasan por una serie de procesos y contactos antes de llegar a la alacena de tu cocina. De acuerdo con la (FDA) Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos, durante la etapa de crecimiento, las frutas y verduras pueden contaminarse con la tierra, agua o fertilizantes. Después de la cosecha, pasan por varias manos y se aumentan los contactos de la tienda a la preparación de alimentos. Es así que la limpieza, a la hora de almacenar y limpiar tus productos frescos antes de consumirlos, cobra relevancia.
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Con lo anterior en mente, conoce a continuación cinco buenas prácticas a la hora de desinfectar y conservar las frutas y verduras. La FDA recomienda además de hacer una selección adecuada de estos productos en el momento de comprarlos, preferir alimentos precortados que estén refrigerados o almacenados en hielo y que no estén golpeados o dañados.
1. Lávate las manos
Lava tus manos por 20 segundos con agua y jabón antes y después de manipular frutas y verduras frescas.
2. Revisa bien
Descarta todas las partes dañadas o golpeadas de tus frutas y verduras antes de prepararlas y consumirlas.
3. Más que un chorro de agua
Frota suavemente las frutas y verduras mientras las enjuagas bajo el chorro de agua. No se necesita usar jabón o un producto para lavar productos frescos. Si lo prefieres, puedes usar un cepillo suave para limpiar las verduras y frutas duras como por ejemplo las naranjas y los melones.
Recetas recomendadas
4. Antes de manipular frutas y verduras ten en cuenta
Lava los productos frescos antes de pelarlos de manera que la suciedad y las bacterias no se transfieran del cuchillo a la fruta o el vegetal.
5. Secar y algo más
Seca las frutas y verduras con una toalla de tela o de papel para reducir las bacterias que aún estén presentes, luego desecha las hojas externas de las frutas y verduras y almacénalas dentro del refrigerador a 40 grados o menos.
Sigue planeado tus comidas saludables y disfrútalas con su limpieza y desinfección adecuada como te acabamos de sugerir, con este paso a paso para que no te rompas la cabeza y te centres en la experiencia del buen comer.
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